CUK 38: Invierno 2012 Fricorsa. “Gracias a la calidad de los productos de Grupo SADA podemos retener a más clientes”

Con más de un centenar de empleados y presencia permanente en las provincias de Córdoba, Jaén y Sevilla y esporádica en Málaga, Granada y Cádiz, Fricorsa es uno de los principales distribuidores de productos congelados y refrigerados de Andalucía. De hecho, junto con otras 56 empresas de toda España, es propietaria de la marca Anedilco, un sello de productos de calidad que sus clientes identifican, valoran y demandan cada vez más. - David Marchal - Para conocer los orígenes de Fricorsa hay que remontarse hasta principios de los años 80. Era entonces cuando empezaba el negocio del yogur y a la familia propietaria de la empresa le surgió la oportunidad de distribuir estos productos en las provincias andaluzas. Así evolucionó la empresa hasta que a finales de la década, y gracias a los contactos de los dueños de la compañía con armadores cuyos barcos faenaban en mares de Argentina, Suráfrica o Namibia, entre otros, tuvieron la posibilidad de incorporar el pescado congelado a su catálogo de artículos. Y poco a poco fueron ampliando sus referencias en el mundo del frío positivo. “Hoy en día somos una sociedad anónima, con un consejo de administración compuesto por un presidente y tres consejeros. En total contamos con más de un centenar de personas en plantilla, estructurados principalmente en las áreas comercial, productiva, logística y de servicios generales”, explica Francisco Portero, director general de la empresa. Además, la compañía acaba de terminar hace unos meses una obra con una inversión de seis millones de euros y que les ha permitido duplicar el número de cámaras destinadas a frío negativo. “Antes teníamos capacidad para 3.200 palés de productos congelados, y hoy hay para 7.000”. Aparte de esto han creado una sala de elaboración propia, sobre todo para el pescado; y han renovado las oficinas. Esto también ha coincidido con la incorporación de unos nuevos modelos de camiones bitemperatura en renting, que les permite servir productos refrigerados y congelados al mismo cliente, lo que supone “una mayor versatilidad y rentabilidad”, en palabras de Portero. La marca Anedilco Durante este tiempo la compañía entró en contacto con otras empresas españolas con inquietudes similares para formar una asociación, denominada Anedilco. Actualmente de asociación ha pasado a ser una empresa compuesta por 57 socios, todos ellos comprometidos para que esta marca aglutine todo tipo de referencias de calidad media y alta: pescados, carnes, precocinados, verduras y, por supuesto, pollo. De hecho, ésta era una de las principales carencias que tenía Anedilco hasta hace un par de años. “No contábamos con un proveedor nacional de carne de pollo que nos asegurara los estándares de calidad que exigimos para nuestra marca, hasta que uno de los socios nos propuso trabajar con Grupo SADA”, recuerda Portero. Es más, el directivo reconoce que hasta antes de empezar a colaborar con Grupo SADA no gastaban muchas referencias de carne de pollo, sólo pechuga y cuartos traseros, y en muchos casos sabía que se trataba de pechuga inyectada. “Es cierto que este tipo de productos son más baratos, y a simple vista no se aprecia, pero cuando se cocina, la diferencia con respecto a la carne seca que vende Grupo SADA es abismal”, afirma Portero. “Y eso los clientes lo valoran mucho”, continúa el directivo, “al igual que vengan calibrados. Hay que pensar que nuestros principales clientes son hosteleros, los cuales están muy preocupados por el coste/ración, puesto que ellos compran por kilos y venden por platos. Saber exactamente cuántas piezas entran en un kilo es fundamental para ellos. Con Grupo SADA, esta preocupación está fuera de toda duda”, puntualiza Portero. Dos tipos de productos De esta forma, Fricorsa se ha convertido en un cliente fiel de Grupo SADA, a quien consume dos tipos de productos: los de Grado A y B. Los primeros son los que mayor calidad tienen; mientras que los segundos, sin perder los estándares de calidad más altos, hacen más hincapié en el tema del precio. “Hay clientes que sobre todo nos piden un producto barato, y para ellos tenemos los productos de Grado B de Grupo SADA, cuyo filtro de calidad es realmente alto; yo diría que son como el Grado A sin calibrar de otros fabricantes”, asegura el director general de la empresa. Lo que Portero tiene claro es que allá donde venden los productos de Grupo SADA los clientes repiten. “Donde van entrando van quedando. De hecho, gracias a ellos podemos retener a más clientes”. Además, para el directivo, tener el respaldo de un proveedor nacional comprometido con sus clientes, y que si alguna vez falta alguna referencia, les aporta una solución rápida, es crucial. “Con Grupo SADA hemos conseguido una solución más profesional, desde el punto de vista de la distribución, con un estándar de calidad, regularidad y capacidad de servicio”, añade Portero.